La mancha salmón es la lesión vascular más frecuente del primer año de vida. Se presenta como una lesión plana de color rosa pálido en la parte posterior del cuello y cuero cabelludo, entrecejo, frente, párpados superiores y en ocasiones nariz o región nasolabial. Estás se acentúan o se hacen más evidentes cuando el niño llora, contiene la respiración, hace esfuerzo para defecar. Cuando aparece en la nuca se denomina “ mordisco de cigüeña” y en la frente/entrecejo se denomina “beso de ángel”. No es necesario tratamiento debido a que un 95% de las manchas de la cara desaparecen en el primer o segundo año de vida. En la nuca las lesiones pueden involucionar o permanecer indefinidamente. En caso de persistir la enfermedad es necesaria la consulta al Departamento de Dermatología Pediátrica con nuestra experta la Dra. María Lia Pieretti.